... y luego, cuando ante ti se habrán muchos caminos y
no sepas cuál recorrer, no te metas en uno cualquiera al azar:
sientate y aguarda. Respira, sin que nada te distraiga,
aguarda y aguarda más aún.
Quedate quieto en silencio y escucha a tu corazón.
y cuando te hable, levantaté y ve donde él te lleve...
No hay comentarios:
Publicar un comentario